La semana pasada fue algo pesadita. Con Candace decidimos ir al Eurochocolat en Perugia. Obviamente el festival del chocolate. El viernes empecé montando. La Domenika van Overis es muy pesada para mí. O no maleable. No sé qué voy a hacer. A la noche nos juntamos en lo de Diarmaid que festejaba su mudanza al quinto piso, con una mejor vista. Comimos curry y tomamos vino. El sábado a la mañana Candace me paso a buscar a las 9 y partimos en auto. Un BMW station wagon muy equipado. El viaje se hizo bastante largo. Zoey y Lolita se portaron muy bien. Las dejamos en el auto para comer el Autogril. Loli dentro de su bolso y Zoey en el asiento de atrás. Comimos ensaladas porque sabíamos que luego sería…chocolate. Llegamos al hotel bastante fácil. Un Best Western llamado Quatrottorri en Ellera cerca de Perugia. Un cuatro estrellas muy bueno. Luego estacionamos al pie de la colina para subir a Perugia con el mini metro súper tecnológico, pero no nos dejaron porque Zoey es muy grande. Taxi debió ser y bastante caro. El festival era una feria de kiosquitos con distintos tipos de chocolates. Muy lleno de gente Loli casi no podía caminar y luego de la odisea para llegar hasta allí, ocurrió el milagro, no queríamos comer chocolate. Me contente con un milka con philadelphia chiquitito, una barra de pan de stelle que es como galletita y muy después un pedazo de chocolate mínimo con naranja. Eso fue todo. Hacia frio y hubo un momento en que debí meter a Loli dentro de mi campera para que se recuperara. Del frio y de lamer chocolate del piso la muy chanchita. Alrededor de las siete emprendimos retirada, habiendo comprado muy poco chocolate. La muestra no era espectacular y creo que el chocolate de Mamusia en San Martin de los Andes es mejor. Disfrutamos la noche en el hotel empezando por el restaurante Il Vizio con muy buena comida. Pasta por supuesto y vino y postre( tortino de pere y cioccolatto). Uff. El domingo rumbeamos para Assisi. Mi tercera vez. Es el santo en el que creo por motivos muy personales, pero la ciudad es simplemente perfecta. Trepamos las basílicas y sacamos muchas fotos. La vibración en la cripta de san Francisco todavía estaba…
Comimos un panino típico, torta al testo de Umbria. Y volvimos. Son 375 km pero se hacen largos aun yendo a 140 porque de golpe el transito es demasiado y se debe parar. Yo venia cabeceando, Assisi es muy ondulada. Paramos un par de veces para hacer correr a las perras. Y llegamos a las siete y media ya de noche. Hoy de vuelta al yugo. Tuve que trabajar extra por reuniones y otras yerbas. Planeo comprar un pasaje para las vacaciones del primero de noviembre y…dormir.
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