Storie di Impressionismo

Como fui a  ver la muestra de Picaso a Verona ahora le tocaba a Bruna ver la de los Impresionistas en Treviso. El domingo me levante temprano, lleve a Loli al parque y limpie. Bruna y Giorgio llegaron a las 10.22, los espere en el anden. Caminamos hasta el museo de Santa Caterina e hicimos mas de una hora de cola para entrar. Dicen que es la muestra mas visitada de Italia y ademas cierra el primero d mayo. Muchísima gente. La recorrimos dos horas. El cuadro Madmoiselle Irene Cahen D'Anvers de Renoir que quería ver porque lo conozco desde siempre, había vuelto a Zurich.Préstamo terminado. Es e que promociona la muestra y no verlo me pareció una estafa.Los cuadros provenían de Escocia y los Estados Unidos, por lo cual, no se ven habitualmente. Luego de Quai d'Orsai y el Marmottan Monet es difícil comparar. Es interesante, no espectacular. En el subsuelo están las salas del 900, Gotuso, Schifanno en fin muy moderno. También hay piezas de la edad de Bronce de la región de Treviso.Salimos a las dos y media directo a almorzar a La Torre mi café favorito.Ensaladas sanas. Lindo día, pero a seguir corrigiendo.

El cuadro que no estaba

Parece el de la Fieracavalli

Cortile de Santa Caterina

Un dia en las termas de Montegrotto

Las vacaciones de Pasqua, tan esperadas porque esta epoca del anio se pone dificil. Sumado a la tristeza que no me abandona y lo mucho que extranio a Eve.No podia irme porque estoy corrigiendo el Internal Assessment.Pero un dia para mi, necesitaba.

Estas son del sitio del hotel

Lirios a la salida

Tulipanes

Viernes santo a las 9 y cuarto nos encontramos con Ángela en Mestre y tomamos el intercity a Montegrotto las termas de Padova Terme Agri Patavina. Desde la estación caminamos al hotel Millepini donde estuvimos el año pasado. Ángela reservo un Day spa con masaje.El hotel tiene tres piletas, una cubierta y un paisaje verde maravilloso de las Colinas Euganeas. Fue un desenchufarse total. Almorzamos ensaladas mirando el valle, fuimos al sauna y tomamos sol en abril.Como a las seis aun había sol fuerte. Caminamos hasta un bar a tomar un Spritz aperol y después al restaurante de sushi. All you can eat! Buenisimo. Volví a las diez. Pilas para seguir trabajando.